Al momento de escribir este artículo me encuentro encerrada en casa por la cuarentena. Estoy sentada en la terraza, bebiendo una cerveza helada, escuchando a Röyksopp y pensando cómo va a cambiar esta pandemia la forma de viajar una vez que haya pasado esta pesadilla. A fin de cuentas vivimos de nuestra agencia de viajes y tenemos que pensar en todo.
Y al pensar en cambios no me refiero solamente a utilizar un cubrebocas o evitar multitudes, me refiero a cómo va a cambiar todo en el aspecto emocional de un viaje, cuando menos en lo que nos acostumbramos a una nueva realidad. Evidentemente en cuanto termine la cuarentena y podamos salir de casa (o nos sintamos seguros para hacerlo) muchos vamos a querer salir o retomar los viajes que nos vimos forzados a cancelar. A muchos no nos queda de otra, las aerolíneas dieron ciertos plazos para volar, habrá que hacerlo para no perder el viaje.
Pero para aquellos que querían hacer un viaje y aún no lo habían planeado, aún están a tiempo de tomar en cuenta otros factores que quizá antes se pasaban de largo. Un viaje cuesta dinero y tiempo, no solo hay que ahorrar, también hay que juntar los días en el trabajo para poder ausentarse y esta pandemia en algún sentido nos va a cambiar a todos. Así que por qué no detenerse, ahora que hay tiempo, para hacer una introspección y sacar el mejor provecho de ese viaje, que sirva para reflexionar, tomar decisiones, tranquilizarse, alborotarse, en fin, solo tú sabes lo que tu mente necesita.
Me gustaría dar algunas sugerencias, las hago en diferentes países no porque tengas que viajar al extranjero, puedes hacer un viaje maravilloso en tu mismo país o hasta una excursión cerca de tu ciudad. Doy sugerencias internacionales para dar más opciones y porque tengo lectores de diferentes partes del mundo. Si no quieres viajar al extranjero, tal vez el destino te sirva como referencia para encontrar algo similar en tu país.
Para reflexionar
El haber pasado semanas o meses encerrado en casa, no necesariamente significa que haya sido tiempo para reflexionar. Todos estamos haciendo lo posible para hacer la cuarentena lo más llevadera posible, como para presionarnos psicológicamente en que tenemos que lograr algo. Así que el tiempo de reflexión y seriedad puede venir después. No se me ocurre mejor cosa que planear un viaje o excursión que incluya caminatas en la naturaleza.
Ya he mencionado en otros artículos que me encanta hacer trekking, porque liberas tu mente y vas tan concentrada en otras cosas relacionadas al entorno en el que te encuentras que dejas atrás celulares (excepto para las fotos) y los típicos problemas cotidianos. Cuánto daría por estar caminando en el Valle del Cocora en Colombia, en el Chaltén en Argentina, en el Parque Nacional de los Glaciares en Montana, por finalmente hacer el Camino de Santiago o hasta en el bosque al lado del pueblo de Patrick en Bélgica. Cuánto daría…
Para ayudar
Mi último viaje antes de la cuarentena fue a Chiapas, uno de los estados más pobres de México. Lo primero que pensé cuando impusieron la cuarentena fue en todas las mujeres y niños indígenas que venden sus productos en las plazas y calles de San Cristóbal de las Casas. Dónde duermen, qué comen, cómo le van a hacer para sobrevivir si la mayoría de sus clientes son turistas. Ni hablar de los pequeños negocios y eso no solo en Chiapas, en todo México y en todos los países del mundo.
Si tienes la posibilidad de viajar, tal vez puedes hacerlo a lugares con más necesidades económicas, donde puedas apoyar a comerciantes, vendedores ambulantes, pequeñas empresas, negocios familiares, entre muchos otros afectados por la crisis. ¿Qué lugares recomendaría? Precisamente sitios como Chiapas, Oaxaca, Yucatán, creo que todos los países tienen sus ciudades o pueblos más vulnerables, a esos recomendaría viajar si se desea ayudar. Recuerda que lo mejor es comprar local y no regatear, pagar el precio justo.
Para sentirte libre
¿Cuál sería al primer lugar al que me gustaría ir en cuanto levanten la cuarentena? Sin duda a la playa. Quiero caminar en la arena y meterme al mar, es todo lo que necesito para sentirme en libertad. Me parece que a muchos les pasará lo mismo, ese deseo por correr al mar.
Después de estar tanto tiempo en casa no vamos a querer estar encerrados, ni tener estrés. Seguramente los lugares al aire libre serán primera opción para la mayoría, sobre todo para los niños y en el mar… ¡la vida es más sabrosa! Ojalá sepamos volver de una manera más consciente, sin afectar el medio ambiente.
Para superar miedos
Si algo nos ha quedado claro es que la vida es muy corta y llena de sorpresas, unas agradables, otras no tanto. Con el coronavirus vimos lo frágil que es la vida y que todo puede cambiar de un día a otro. Por un lado nos llenó de miedo a enfermarnos, a morir, pero por otro nos ayudó a superar o a mostrarnos más fuertes ante otro tipo de problemas como la ansiedad y la claustrofobia.
Si superaste esto, puedes hacer mucho más. En tu siguiente viaje proponte salir de tu zona de confort y enfrentar tus temores. Si tienes que pasar horas en un avión, no pasa nada, no vas a durar para siempre en el vuelo. Quieres visitar un país donde no solo se habla otro idioma, sino que también tiene una cultura muy diferente, pues lo mejor que puedes hacer es ir e intentar empaparte de esa cultura. ¿Qué te parecería empezar con Marruecos?
Para buscar la paz interior
Tal vez después de todo esto el viajero busque más paz, busque la tranquilidad después de toda la incertidumbre que ha vivido. Tal vez todo esto se tome como una lección de vida, otros afirman que es un claro mensaje que nos mandó el planeta de que teníamos que detenernos un poco porque íbamos demasiado deprisa.
Y para eso hay muchos lugares a donde se puede viajar en busca de paz, no estoy hablando de destinos religiosos, que si es lo que buscas pues lo tienes todavía más fácil. Pero para aquellos que buscan lugares que realmente los llenen de energía y los tranquilicen, hay sitios maravillosos, pero creo que es necesario volver a las recomendaciones de lugares en la naturaleza, si necesitas encontrar paz, no vas a meterte a una Ciudad de México o un Nueva York.
Creo que lo que buscaremos más, al menos en los siguientes meses después de la cuarentena, son aquellos lugares donde podamos pensar, meditar, disfrutar, pero al aire libre. Donde no haya distracciones, pero tampoco temor. Los parques nacionales son la opción más acertada, lugares donde puedas oler la tierra mojada, escuchar la lluvia, encontrar tu centro.
Para reinventarse
Hay sitios que te inspiran, que te llenan de creatividad porque están llenos de rincones hermosos y también por su gente. En lo personal las ideas de iniciar algún proyecto, escribir algún artículo o hasta pensar en alguna venta, me han venido cuando estoy en una ciudad que tenga cultura, gastronomía, arte, música, ambiente en las calles. Esas ciudades vibrantes que te hacen sentirte viva y que te susurran al oído “tienes que hacer lo que te apasiona”.
Para eso deberían servir los viajes a Europa como fuente de inspiración, en mi caso mi musa fue la ciudad de Florencia hace muchos años, donde decidí que tenía que seguir mis sueños y donde todo el entorno me inspiraba, me motivaba a hacerlo. Cuántos artistas tuvieron su inspiración en ciudades como París o Londres. Todo lo que vivimos también puede ser oportunidad para reinventarse.
Obviamente todo es relativo porque el que a unos les de paz hacer caminatas en el bosque, a otros les puede resultar estresante. Pero comparto sugerencias basadas en experiencias personales o en aquellas que hemos diseñado para otros viajeros. Lo más importante es que recuerdes que ese destino que estás buscando puede ser tu terapia de viaje.
Cuando estemos listos para viajar de nuevo, recuerda que podemos organizarte todo 100% a la medida a través de nuestra agencia de viajes Tripdreaming. Escríbeme a silvia.lucero@tripdreaming.com.
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