Cuando llegas a una ciudad y te hospedas alejado del centro histórico o de las principales atracciones turísticas eres aún más crítico con los hoteles. Y hay que ser honestos, si el hotel no te gusta, te va a arruinar parte del viaje. Un hotel –cualquiera que sea su categoría-, es en parte la carta de presentación de la ciudad, así que se puede decir que mi primer contacto con Munich fue a través del Leonardo Royal Hotel.
Yo llevaba muy altas las expectativas en torno a la ciudad, ya que solo me habían hablado maravillas de ella. Iba emocionada por tener la oportunidad de ir por primera vez a la fiesta más grande de la cerveza, por irme de excursión a ver los castillos y porque finalmente iba a conocer Munich. Así que llegar el primer día a un hotel éste, hizo que empezáramos el viaje cumpliendo esas expectativas.
Pero ahora sí vamos a entrar en detalle para que veas porqué lo recomiendo.
Para empezar es un hotel enorme, muy bonito, contemporáneo y con mucho estilo. Además -no sé si haya sido por el Oktoberfest- pero me pareció que tenía buen ambiente. Como a nuestra llegada nos dieron dos bebidas complementarias -punto positivo ;-)- aprovechamos y nos tomamos unos mojitos en el bar antes de salir a cenar al centro de Munich.
Todas las instalaciones estaban muy bien cuidadas, se veía como nuevo el hotel, siempre cuidando ese toque moderno. Nuestra habitación era normal, de buen tamaño con cama doble, muy cómoda, bonita y moderna al igual que el baño. Tal como esperábamos que fuera, después de haber visto el hotel.
El desayuno era excelente, tipo buffet pero enorme con gran variedad de panes, carnes frías, pescados, huevos, quesos, jugos, hasta miel que podías coger directamente de la colmena. Me encantó.
Aunque el hotel no está ubicado en el casco antiguo, a 5 minutos –caminando- se encuentra una estación de metro. También está cerca del BMW World y del Olympiapark. Si llevas coche, como era nuestro caso, puedes dejarlo en el estacionamiento del hotel u optar por la opción más económica que es dejarlo en el estacionamiento público que está cruzando la avenida, pero queda justo frente al hotel.
En general este hotel me pareció una excelente opción para el viajero de negocios o para aquel que no le importa estar cerca del centro, pero sí hospedarse en un hotel grande, moderno y de altura.
*Gracias al Leonardo Royal Hotel Munich por su amable hospitalidad.
Si te gustaría viajar a Munich y que organice tu viaje, escríbeme a silvia.lucero@tripdreaming.com.