Cuando llegas a una ciudad después de 10 horas de tren, como fue nuestro caso, quieres descansar bien, tener buen espacio, una buena cama y un buen baño. Como Viena fue la primera parada de un hermoso viaje de un mes por varios países de Europa, se puede decir que arrancamos con el pie derecho hospedándonos en el Best Western Premier Hotel Harmonie. ¿Por qué lo recomiendo?
Un hotel renovado
Si te has quedado en otros hoteles Best Western en Estados Unidos, que no te gane la idea de que vas a encontrar lo mismo aquí, ya que éste es un boutique hotel muy diferente a otros de esta cadena tradicional.
El hotel ha sido totalmente renovado, así que vas a encontrar colores vivos, decoración moderna y lógicamente todo se ve nuevo. Me llamó la atención que tienen hasta “cuartos antialérgicos”, nunca había visto algo así, ya que para los que sufrimos alergias, es excelente que pongan cuidado hasta en ese tipo de detalles.
Habitaciones amplias
Nuestra habitación era muy amplia, con cama doble, aquellos lectores que hayan viajado por Europa, recordarán que no todos los hoteles tienen camas grandes, de hecho muchos –tal vez la mayoría- tienen dos camas individuales juntas, así que por eso creo que es importante mencionar cuando los hoteles tienen también esta opción.
Desayuno delicioso
Qué bien desayunamos ahí. Tenían de todo, mimosas, diferentes tipos de pan, huevos, quesos, carnes frías, cereales, pasteles, entre otras opciones. En general me pareció un desayuno buffet muy completo y donde todo sabía fresco.
Hora del té…¡y pasteles!
Otra cosa que me gustó, sobre todo para los de diente dulce o simplemente para los que son como yo, que les encanta comer, es que entre 3 y 6 de la tarde, tienen hora del té y pasteles.
Así que en la tarde, cuando estábamos cansadísimos después de recorrer la ciudad hicimos un break para tomar un té, acompañado por la famosa tarta Sacher. De hecho puedo decir que comí mejor en el hotel, que en el restaurante al que fui esa noche a cenar.
Buena ubicación
El hotel estaba muy bien ubicado es una calle muy tranquila en la zona de Serviten, que nos permitió hacer todo a pie. Queda a solo 10 minutos caminando de la iglesia Votivkirche, que fue donde nosotros empezamos nuestro recorrido turístico; a 5 minutos del Museo de Sigmund Freud y como a media hora caminando del resto de la mayoría de las atracciones turísticas del centro.
En cuanto a la distancia con la estación de tren, nosotros llegamos a la estación Wien Hauptbahnof, que está a unos 20 minutos en auto del hotel, pero como en Viena hay Uber, tomamos ese medio de transporte y pagamos entre 8 a 10 euros. Me pareció excelente.
Highlight del hotel
Lo más destacado, por lo que recomendaría hospedarse ahí es porque es un hotel renovado, moderno, cómodo, donde vas a descansar súper bien.
Dónde: Best Western Premier Hotel Harmonie
Harmoniegasse 5-7, 1090, Viena, Austria
*Gracias al Best Western Premier Harmonie Vienna por su amable hospitalidad.
Si deseas viajar a Viena y necesitas que alguien organice tu viaje, escríbeme a silvia.lucero@tripdreaming.com