Escrito por viajera Indira Villegas C.
Si tienes una semana y te apetece conocer Oriente Medio, te recomiendo que vayas a Jordania. En este país encontrarás de todo: el desierto, dos mares famosísimos (el Mar Muerto y el Mar Rojo) una de las maravillas del mundo “Petra” y muchas cosas más.
Puedes encontrar vuelos a buen precio a Aqaba (que está al sur del país) ya que para atraer turistas internacionales siempre tienen ofertas y hay hoteles para todos los presupuestos. Si te gusta el buceo, estás en el lugar perfecto ya que en Aqaba, está el Mar Rojo.
Desde Aqaba puedes ir al Desierto de Wadi -Rum “Desert of Mountains”, ya que está solamente a 50 Km. (una hora aprox.) puedes ir y venir en el mismo día, pero si tienes oportunidad te recomiendo que duermas ahí, ya que es padrísimo poder ver el amanecer, mientras das un paseo en camello.
A 160 Km. de Aqaba se encuentra Petra, “la Ciudad Rosada”. Al tratarse de una de las siete maravillas del mundo, lo que te pueda decir de este lugar será poco y tendrás que descubrirlo por ti mismo.
Para ir más hacia el centro y norte del país, te recomiendo que te quedes al menos dos noches en Amman (la capital de Jordania). De camino a Amman, tu primera parada tendrás que hacerla en el Mar Muerto, ahí podrás aprovechar darte un baño y hacerte uno de sus famosos tratamientos con los productos de ese lugar.
Por el camino al Mar Muerto, encontrarás innumerables formaciones de sal, según los guías locales alguna de ellas es la famosa mujer de Lot (como cada guía dice que es una estatua diferente, puedes hacerte una foto con la que tengas más a mano y proclamarla como la bíblica mujer de Lot). La segunda parada será en el río Jordán, donde fue bautizado Jesús, luego visitarás el Monte Nebo, donde según la biblia falleció y fue enterrado Moisés, además podrás disfrutar de unas vistas increíbles del Mar Muerto y finalmente antes de llegar a Amman, te detendrás en la ciudad de Madaba, ciudad conocida por su mosaicos y por su Iglesia Ortodoxa de San Jorge.
Al día siguiente por la mañana te aconsejo visitar la ciudad de Amman. Los puntos más interesantes son: el teatro romano, sus mezquitas y el zoco. Por la tarde, a una hora de Amman se encuentra Jerash, una antigua ciudad romana, denominada la Pompeya del Este. Asegúrate de reservar tiempo para conocerla, ya que es sorprendente por la gran calidad y cantidad de restos arqueológicos que se conservan.
Aprovechando que estás cerca, no dejes de visitar Jerusalén. La Ciudad Santa, cargada de historia y religiosidad, con toda la historia moderna que conlleva. Desde Amman lo más cercano es cruzar la frontera por Gaza (Cisjordania). Si no dispones de mucho tiempo, lo ideal es ir a conocer los lugares más emblemáticos como: el Jardín de los Olivos, la Iglesia y Tumba de la Virgen María, la Iglesia del Santo Sepulcro (donde está la Piedra de la Unción) el Muro de las Lamentaciones, la Puerta de Damasco y la Vía Dolorosa (el vía crucis) y antes de emprender la vuelta a Aqaba, visita Belén, ya que está solamente a 8 Km. para conocer su famosa Basílica de la Natividad de Jerusalén.
Recomendación: en mi caso para conocer todo el país, incluso Jerusalén, contraté un taxi, para que me llevara a todos los lugares que les he contado. El taxi me dejó en la frontera de Jordania y una vez en Jerusalén contraté otro taxi-guía para que me hiciera el tour por Jerusalén y Belén y me llevara de regreso a Aqaba. El precio dependerá de tu habilidad para regatear, ya que en este país todo es negociable. Otra cosa importantísima, es que no puedes regresar sin haberte tomado uno de sus famosos tés y haber fumado en una shisha.